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Pikoro: Aparición en el episodio
122 de Dragon Ball.
Heredero del legado de su padre, se puede llegar a considerar una prolongación
de la existencia de éste. Desde su nacimiento, su primer objetivo, fue hacerse
lo bastante fuerte para vengarse de Goku. Tras tres años de crecimiento
acelerado y duros entrenamientos, Pikoro participó en el 23 Torneo de las Artes
de Marciales bajo el nombre de Mayunia con la intención de matar a Goku. Tras
eliminar a Krilin en los cuartos de final, tuvo que enfrentarse a Kami Sama, a
quien encerró con una reversión al Mafuu-ha. Finalmente se enfrentó con Goku
en la final revelando su verdadera identidad y asustando a todo el público. La
pelea contra Goku fue una de las más épicas recordadas en la serie. Finalmente
Goku logró liberar a Kami Sama y derrotó a Pikoro. Ante la sorpresa de todos,
Goku le dio a su rival una semilla del ermitaño el cual se recuperó y prometió
venganza uno de estos días. Años más tarde se vería obligado a unir sus
fuerzas con Goku para luchar contra Raditz. Tras la derrota de Raditz y por
consecuencia la muerte de Goku, Pikoro decidió entrenar a Gohan, ya que él creía
que el hijo de Goku era la salvación en la lucha contra Nappa y Vegeta que se
realizará dentro de un año. En el entrenamiento, Pikoro se encariñó con el
pequeño Gohan, al cual le salvó la vida cuando Nappa lo atacaba. Durante este
combate, Pikoro descubrió que pertenecía a una extraña raza llamada
Namekuseijins. Durante su periodo en el otro mundo, entrenó a ordenes de Kaio
Sama, hasta que fue revivido y transportado a Namekusei. En este Planeta
encontraría a un moribundo Neil, con quien se fusionaría aumentando su poder
de una manera extraordinaria. Con este nuevo poder pelearía con Freezer, derrotándolo
en su primera transformación. Pero cuando Freezer utilizó sus dos restantes
transformaciones derrotó a Pikoro fácilmente. Después Freezer fue derrotado
por Goku en su estado de Super Saiyajin. Un año más tarde, y ante la amenaza
de la llegada de los androides, entrenó junto con Goku y Gohan. Tres años más
tarde derrotaría al Dr. Gero (androide #20), pero su impotencia ante los
androides #16, #17 y #18 y la aparición de Cell, hizo que se fusionara con Kami
Sama otra vez para aumentar su poder. Con esta nueva fusión, Pikoro obtuvo la
sabiduría de Kami Sama y un incremento increíble de poder que superaría al de
un Super Saiyajin, de esta manera, Pikoro es uno de los pocos personajes que no
se quedan atrás ante el poder de un Saiyajin. Pikoro jamás asumió el rol de
Dios, que fue ocupado por otro Namekuseijin llamado Dende. Después de la
derrota de Cell a manos de Gohan, Pikoro volvió a la acción por la aparición
de Majin Boo. En el 25 Torneo de las Artes Marciales, cayó en cuartos de final
al retirarse ante Kaio Shin, mientras que contra Majin Boo enfrentó al monstruo
junto a Goten y Trunks. Tras morir y ser revivido con las Esferas del Dragón,
Pikoro colaboró mucho con su energía en la Genkidama de Goku para eliminar a
Majin Boo. Años después, Pikoro trataría de ayudar a Gohan poseído por Baby,
pero su alumno lo remataría con un Kame Hame Ha. Después de la derrota de
Baby, Pikoro sacrificaría su vida para hacer desaparecer las Esferas de
estrella negra (Dark Dragon Ball). Tras su muerte Pikoro ayudó a Goku a escapar
del infierno con la técnica fusión del corazón, para que de esta manera Goku
pueda luchar contra el Super Androide #17.
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